Durante una audiencia en una corte federal en Los Angeles, el ex agente de Shohei Ohtani, Ippei Mizuhara, se declaró no culpable de fraude bancario y de impuestos en un escándalo de apuestas ilegales que involucra tanto a él como al jugador de los Dodgers de Los Angeles. A pesar de esta declaración, se espera que Mizuhara y los fiscales federales continúen con su acuerdo, con el juicio programado para el 3 de julio. Se especula que Mizuhara podría recibir una sentencia reducida si coopera plenamente en el caso.
El posible castigo para Mizuhara incluye hasta 30 años de prisión por fraude bancario y hasta 3 años por falsificación de declaraciones de impuestos. Aunque podría ser recomendado para una sentencia reducida si acepta su responsabilidad, el juez tendrá la última palabra. Además, es probable que Mizuhara sea deportado a Japón debido a sus delitos, ya que no tiene ciudadanía estadounidense a pesar de haber vivido la mayor parte de su vida en Estados Unidos.
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